En la actualidad, encontramos que son pocos los docentes que se mantienen actualizándose en su práctica pedagógica, debido a que buscan diferentes pretextos para no hacerlo, como por ejemplo la falta de tiempo, dinero y hasta porque están próximos a pensionarse.
Sólo algunos docentes que deciden continuar formándose son los que tienen en cuenta las necesidades de la comunidad educativa y lo hacen porque de verdad quieren actualizarse y mejorar la calidad de la educación; aunque hay otros que lo hacen por interés de ascender en el escalafón para ganar unos pesos de más, sin darle mucha importancia a la aplicabilidad y uso que le pueden dar a lo que aprendieron.
De esta manera, nos encontramos con el dilema de si verdaderamente el maestro es un agente dinamizador o pasivo en el proceso de aprendizaje de sus estudiantes, pero la forma de averiguar sobre esto se encuentra yendo directamente al aula de clases, observando si su participación y la de sus alumnos son activas para convertirlos en personas competentes y capaces de generar preguntas y resolver dudas.
De esto último, dependerá el reconocimiento y aprecio que los alumnos muestren por su docente, quienes valorarán el conocimiento y dedicación que muestre el docente en el aula de clases.
Sólo algunos docentes que deciden continuar formándose son los que tienen en cuenta las necesidades de la comunidad educativa y lo hacen porque de verdad quieren actualizarse y mejorar la calidad de la educación; aunque hay otros que lo hacen por interés de ascender en el escalafón para ganar unos pesos de más, sin darle mucha importancia a la aplicabilidad y uso que le pueden dar a lo que aprendieron.
De esta manera, nos encontramos con el dilema de si verdaderamente el maestro es un agente dinamizador o pasivo en el proceso de aprendizaje de sus estudiantes, pero la forma de averiguar sobre esto se encuentra yendo directamente al aula de clases, observando si su participación y la de sus alumnos son activas para convertirlos en personas competentes y capaces de generar preguntas y resolver dudas.
De esto último, dependerá el reconocimiento y aprecio que los alumnos muestren por su docente, quienes valorarán el conocimiento y dedicación que muestre el docente en el aula de clases.